Noticias -

b11d3-eulogio.jpg

"Intenté hacer del movimiento asociativo el instrumento necesario, imprescindible y capaz de mejorar la vida de las personas con parálisis cerebral" Eulogio López, premio ASPACE Ipsen Pharma 2019 en la categoría “Jaume Marí al Compromiso”

Eulogio López ha dedicado la mayor parte de su vida profesional a las personas con parálisis cerebral. Ha sido presidente de ASPACE Galicia desde 2013 hasta 2019 y gerente de ASPACE Coruña entre 1991 y 2018, durante todos estos años ha trabajado sin descanso por visibilizar a las personas con parálisis cerebral representando el compromiso, la dedicación y la lucha por la defensa de los derechos de este colectivo.
 
Asimismo, ha formado parte también del Comité Ético de Confederación ASPACE y del CERMI Galicia. En la actualidad, una vez jubilado, ejerce como Presidente de la Fundación tutelar ASPACE Coruña. Por todo este trabajo le ha sido concedido el premio ASPACE Ipsen Pharma en su categoría de Compromiso.

1. ¿Qué ha supuesto para ti el recibir este premio al Compromiso como homenaje a toda tu carrera en el Movimiento ASPACE?
Una enorme satisfacción y por supuesto un reconocimiento por todos estos años de trabajo y esfuerzo dedicados al movimiento asociativo ASPACE y al mundo de la discapacidad. También orgulloso y halagado por haber trabajado con el colectivo de personas con parálisis cerebral y sus familias y por haber tenido la oportunidad de aportar mi granito de arena desde la responsabilidad a mejorar su vida día a día. 
 
2. ¿Cómo recuerdas el día de la entrega del premio en el Congreso de Córdoba?
Un día especial y un momento lleno de emociones. La verdad es que  tuve la oportunidad de recordar y reflexionar sobre  momentos importantes relacionados con mi carrera profesional y de hacer un balance públicamente de ella. Por otro lado me sentí arropado y querido por muchísima gente e instituciones. En primer lugar por mi familia y por compañeros, personas usuarias y familias de ASPACE Coruña y federación ASPACE Galicia, pero también por el conjunto de la Confederación ASPACE y por muchos profesionales con los que durante muchos años compartí inquietudes e ilusiones.
 
Además, recibir este premio en Andalucía fue significativo para mí, pues en esa tierra pasé momentos muy bonitos de mi vida ya que en ella nacieron tres de mis cuatro hijas, terminé la carrera y sigo teniendo grandes amigos 40 años después.
 
3. ¿Por qué decidiste dedicar tu carrera profesional a la discapacidad, y en concreto a la parálisis cerebral?
Debo reconocer que yo quería estudiar Derecho, pero mi familia es de origen muy humilde y al final estudié Magisterio, en concreto pertenezco a la primera promoción con la especialidad de Educación Especial. Estoy hablando de principio de los años 80, era una especialidad nueva y no lo dudé ya que estaba muy presente en mi cabeza el haber compartido escuela en mi aldea con una vecina con síndrome de Down, y con un primo que sufrió meningitis y que había quedado con serias secuelas. Recuerdo perfectamente aquella escuela rural sin luz eléctrica y sin calefacción donde se practicaba la inclusión natural, y donde la inclusión social y la aceptación de la diferencia era la norma no escrita pero real.
 
Posiblemente esas experiencias fueron determinantes a la hora de orientar mi  vida profesional a la discapacidad y en concreto a la parálisis cerebral.
 
4. ¿Cómo recalaste en ASPACE Coruña?
Yo estaba becado por la Diputación de Lugo como docente, envié mi currículum a ASPACE Coruña y al poco tiempo me contrataron como profesor titular de aula, y allí permanecí desde el 22 de octubre de 1985 hasta el 23 de noviembre de 2018 ejerciendo diferentes funciones y teniendo responsabilidades diversas. Todo un honor. 
 
5. Algún momento de tu vida profesional que recuerdes con especial cariño
Muchos y variados, pero posiblemente recuerdo especialmente mi etapa como profesor donde viví experiencias únicas con los alumnos y alumnas, desde verles dar los primeros pasos o escucharles decir por primera vez papá o mamá o algo que parece tan simple como verles sonreír. No sería coherente no hacer referencia a mi etapa como director y como Gerente de ASPACE Coruña, así como presidente de la federación ASPACE Galicia y representante en otros organismos y entidades. 
 
Intenté desde la responsabilidad y el compromiso hacer del movimiento asociativo el instrumento necesario, imprescindible y capaz de mejorar la vida de las personas con parálisis cerebral y sus familias. No dudé en dedicar a esta tarea lo mejor de  mí  mismo , sabiendo en todo momento cuales eran los objetivos a conseguir y los recursos necesarios para ello. Creo que el resultado está a la vista. ASPACE Coruña es un centro de referencia y la Federación ASPACE Galicia es un interlocutor necesario y un ejemplo de buen hacer desde la cohesión y la humildad.
 
6. ¿Cómo resumirías estos años en contacto con las personas con parálisis cerebral, sus familias y los y las profesionales de ASPACE?
ASPACE forma parte de mi vida, he vivido y aprendido con las personas con parálisis cerebral, con sus familias y con los profesionales que ponen, en la mayoría de los casos, lo mejor de sí mismos al servicio de la causa. He tenido la enorme satisfacción, desde la convicción personal, de trabajar para este colectivo, que siendo muy vulnerable tiene una enorme vitalidad. 
 
Intenté siempre estar con ellos, no simplemente al lado de ellos, y poner en práctica valores personales en los que creo desde el rigor y la ética profesional. Tuve claro, desde el principio, que la lucha por los derechos del colectivo y la mejora de su calidad de vida, demostrando sus capacidades, era la bandera del conjunto del movimiento asociativo ASPACE.
 
7. ¿Crees que se han producido muchos cambios en el sector de la discapacidad, y en concreto de la parálisis cerebral, desde que comenzaste a trabajar en ello hasta ahora?
Sinceramente creo que sí, yo aún recuerdo los términos “subnormal” y otros de este tipo, o los autobuses sin rampas o cuando vi las primeras sillas eléctricas, que por cierto las usaban personas con parálisis cerebral de Portugal. El reconocimiento de la parálisis cerebral como colectivo específico fue el comienzo para generar a su alrededor una realidad acorde a sus necesidades en todos los ámbitos de su vida y en su día a día. La sociedad ha cambiado, nuestro colectivo también.
 
8. ¿Y en cuanto a inclusión y visibilización del colectivo?
También, sin duda. Un ejemplo fue el congreso de Córdoba y las campañas de sensibilización desarrolladas por la Confederación y las asociaciones de toda España. Pero eso no es suficiente, creo que las personas con parálisis cerebral son más visibles en la sociedad, pero eso no quiere decir que exista una inclusión real. Al contrario creo que todos los días se vulneran directamente  derechos básicos de estas personas, tanto en cuestiones fundamentales como en las pequeñas cosas del día a día. 
 
No se conseguirá una inclusión y una visibilización real mientras no pongamos a las personas con parálisis cerebral en el centro de nuestras actuaciones en todos los ámbitos de la vida, empezando por la educación. Debemos cambiar el modelo educativo para ir hacia una escuela realmente inclusiva en la que con los recursos y apoyos necesarios quepan todos los niños y niñas, también quienes tienen parálisis cerebral. Sólo desde una escuela auténticamente inclusiva avanzaremos hacia la inclusión real, este concepto no tiene que estar reñido con los centros específicos, hoy por hoy, necesarios. Tenemos que dejar de poner parches. 
 
9. Haz una predicción, ¿cómo ves el sector de aquí a 20 años?
No es fácil. El movimiento asociativo es necesario y fuerte, tiene muchas fortalezas pero también enormes amenazas. Debe seguir repensándose e inventándose todos los días. Tenemos conocimientos, desarrollamos habilidades pero en muchas ocasiones nos fallan las actitudes, los intangibles, lo que no vemos y eso es fundamental para darnos cuenta que estamos en una sociedad cambiante en la que los más vulnerables se tienen que hacer un hueco.
 
El movimiento asociativo debe estar vigilante y no perder de vista cuales fueron sus orígenes y principios que lo inspiraron, de lo contrario será carne de cañón de intereses estrictamente económicos. Nuestras asociaciones no pueden perder de vista la parte humanista que las ha inspirado siempre, no son empresas al uso. Para ello es absolutamente  necesario escuchar activamente a las personas y actores que lo configuran y acompañarlos en sus demandas y reivindicaciones ya que sólo así conseguirán plenamente derechos. Más antes que tarde, estoy seguro, serán ciudadanosy ciudadanas activos y plenos. Dentro de 20 años habrá otros retos a los que hacer frente sin duda. 
 
10.  ¿Cuáles son tus planes de futuro ahora que te has jubilado? ¿Seguirás en contacto con ASPACE y las personas con parálisis cerebral?
Es difícil planificar el futuro, ni sé si es oportuno. Si es verdad que la vida se ve de otra forma y posiblemente uno se plantea quehaceres que antes eran complicados de acometer. Por eso lo primero que quiero hacer es estar tranquilo y cuidarme disfrutando de mi familia y nietos así como de mi huerta y de las pequeñas cosas, pero sobre todo disfrutar de los años que vengan.
 
Sería incoherente por mi parte no seguir en contacto con ASPACE y con las personas con parálisis cerebral, saben de mi disposición y compromiso. Por eso asumí, en su momento, ser presidente de la Fundación Tutelar ASPACE Coruña y asesor de la Junta Directiva de la Asociación. 

0 Comentarios

Tienes que estar registrado para publicar un comentario

Close
Close
Close