Unas 1.500 personas de diferentes colectivos de la discapacidad, convocados por el CERMI, celebraron el pasado viernes una concentración cívica frente al Congreso de los Diputados para exigir el derecho al voto de casi 100.000 personas con discapacidad intelectual, enfermedad mental o deterioro cognitivo que no lo tienen reconocido en la actualidad, y para reclamar que se dote de plena accesiblidad a todos los procesos electorales.